La presencia del futbolista brasileño Ronaldinho en Sucre, Capital del Estado Plurinacional de Bolivia, provocó la tarde de ayer un caos que obligó a la Policía Nacional a utilizar gases lacrimógenos, ante la posibilidad de ser superada la seguridad del equipo de Rio de Janeiro.
El entrenamiento, que se llevó a cabo en el Estadio Patria, contó con la presencia de autoridades departamentales, además de una inesperada presencia de aficionados, cuyo número obligó a tomar mayores precauciones, informó la televisión privada boliviana, que mostró imágenes del entrenamiento y la gasificación.
Ronaldinho fue objeto de un reconocimiento y le fue obsequiado un poncho típico de la zona, que el brasileño se puso de forma inmediata a tiempo de agradecer el cariño de la gente.
“Gracias, muchas gracias”, alcanzó a decir el futbolista, que se sorprendió por la cantidad de gente que fue al estadio, portando en algunos casos, pancartas que hacían referencia a su mejor juego en relación con el de Messi.
Flamengo se aclimata en la ciudad de Sucre para el partido que debe sostener la semana que viene contra el Real Potosí, en la ciudad de Potosí, en el marco de la Copa Libertadores de América.
Los hinchas que se encontraban en las afueras del escenario capitalino criticaron la actuación del organismo de seguridad, del cual dijeron no entendían su reacción.
“No estamos haciendo nada malo, sólo hemos venido a verlo al jugador Ronaldinho”, comentó en tono molesto una señora de cerca de cincuenta años de edad, que se identificó como una ama de casa.
/opinion.com.bo
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