Fuente: El delegado Carlos Romero, del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS), denunció hoy que logias masónicas conformadas por ex paramilitares en la ciudad de Sucre financian acciones para hacer fracasar la Asamblea Constituyente de Bolivia. Romero precisó que en ese complot también participan autoridades del oriental departamento de Santa Cruz y del partido opositor Poder Democrático Social (PODEMOS).
En las más recientes agresiones contra asambleístas, dijo, se pudo constatar que detrás estaba la mano del Comité Interinstitucional y de dirigentes cívicos cruceños.
Asimismo señaló que a la denominada "Liga Sucre" está vinculada una logia masónica que participó en la dictadura militar del ex mandatario Luis García Meza.
Esa agrupación coordina con sus similares de Santa Cruz para boicotear el éxito de la Asamblea, remarcó.
A juicio de Romero, el ministerio público debería investigar quienes incitan a la violencia con el supuesto motivo de defender el traslado a Sucre de la sede de todos los poderes del Estado, cuando la verdadera intención es atentar contra el proceso de cambio en Bolivia.
Romero denunció que los grupos violentos que arremetieron contra los asambleístas del occidente y del MAS lo hicieron bajo el amparo de la alcaldía de Sucre y de los dirigentes del Comité Interinstitucional.
También señaló que pese a las condiciones hostiles en que los asambleístas deben trabajar en Sucre, la bancada del MAS decidió mantenerse en esa urbe, sede de las sesiones del ente deliberativo.
Para mañana, dijo, la directiva del foro definirá la agenda de convocatoria de las plenarias a partir del martes próximo.
Los disturbios en la capital de la República comenzaron el pasado
jueves y fueron repudiados sobre todo porque los agresores -supuestos universitarios- golpearon incluso a mujeres, como las asambleístas Mirta Jiménez, Marcela Revollo y Loyola Guzmán.
Los opositores hicieron estallar petardos de dinamita desde la madrugada para impedir las sesiones plenarias del foro, luego de 13 semanas de receso, y hostigaron además a las personas con atuendos originarios.
Según el asambleísta Raúl Prada, otro de los agredidos, esos incidentes
desnudaron al Comité Interinstitucional de Chuquisaca que garantizó seguridad a los
constituyentes para que permanecieran en Sucre, y luego instigó contra ellos a supuestos universitarios extremistas venidos desde Santa Cruz.
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