Tras 19 días de movilización de Sucre, capital del departamento (gobernación) sureño de Chuquisaca, el intento del presidente de Bolivia, Evo Morales, de abrir un diálogo con los líderes de esa localidad y
Los líderes del departamento de Chuquisaca, confirmaron a medios informativos locales su decisión, anunciada hace días, de no asistir a la mesa de negociaciones instalada por el gobierno en Cochabamba, ciudad del centro del país, porque, a su juicio, "no es un proceso diálogo franco".Además, exigen conversar en su ciudad. "Es hora de que vengan a Sucre, porque hay problemas en Sucre, y no tiene que tratarnos como si fuéramos delincuentes (...) Ellos quieren abrir el diálogo, pero mandar miles de campesinos para sitiar a Sucre", dijo el rector universitario Jaime Barrón, presidente del comité que aglutina a las entidades que promueven el retorno de los poderes Ejecutivo y Legislativo de
A la cita convocada por Morales en Cochabamba, reiterada a pesar de los anuncios de Sucre, sólo asistieron representantes del gobierno. El fracaso agravó la conflictiva situación política boliviana, que incluye crecientes insultos y ataques entre oficialistas y opositores, huelgas regionales, peticiones de renuncia de Morales y la paralización de
El gobierno de Morales ha anunciado que reunirá el próximo 10 de septiembre en Sucre a 100.000 indígenas, campesinos y cultivadores de coca afines a Morales.
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