Ahmadineyad llega a Bolivia con una delegación oficial de 35 personas, aunque una misión de avanzada ya se encuentra desde hace dos días coordinando su visita y afinando los acuerdos.
El poder Ejecutivo señaló que los entendimientos boliviano-iraníes serán un importante acicate para inyectar recursos financieros frescos y tecnología de punta a la industrialización de sus reservas de gas, estimadas en 1,37 billones de m3, la segunda de la región después de Venezuela.
La visita de este jueves 27 de septiembre, se realiza en un clima de tranquilidad, a pesar de que los distintos medios de prensa escritos como de televisión y radio, intentan crear y mostrar un clima de polémica fuerte. Contrariamente a lo que lo que se trata de mostrar ante la prensa internacional la población espera con mucha espectativa el arribo de la delegación de la república de Irán.Desde tempranas horas se han tomados las medidas normales de seguridad para este tipo de visita de mandatarios de otros países a Bolivia.
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