Sucre, Bolivia, 18 ago (PL) La Asamblea Constituyente de Bolivia cerró esta semana con importantes acuerdos sobre la redacción de la futura carta magna, pese a medidas de protesta de la oposición que hoy todavía intentan obstaculizar sus sesiones.
Sin embargo, la más reciente decisión de descartar el análisis en plenaria del tema de la capital del país y remitirlo a una comisión especial mantiene detenido al foro y enfrentados a delegados, algunos de ellos partidarios de llevar la sede a una región más segura, como Cochabamba.
De acuerdo con autoridades gubernamentales, las nuevas maniobras de grupos adversos al ejecutivo tiene la finalidad de boicotear la Asamblea, cuya vigencia ha sido ampliada hasta el 14 de diciembre próximo.
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